A mi súperheroína

A mi súperheroína

 

 

 

 

 

Por Luis Eduardo Vivero.

Feliz día, mamita de mi amor
agradezco tus enseñanzas
desde el corazón.

Qué mejor que tener una mamá
– que de su labor salió invicta
que con su ejemplo te enseñe a amar
– aunque sea estricta
y también a toda costa a perdonar
– porque nada es a media tinta.

Eres un verdadero tesoro en mi vida
como la tetita para el recién nacido
como el chupete para un bebé
como el helado para un niño en un día caluroso
como la ilusión de la primera fiesta para un adolescente
como la fe que produce el primer amor.

Es por eso que tus abrazos sanan el alma
porque en tu pecho encuentro la calma
después de haber navegado por mares
en tus brazos ya no hay pesares.

Feliz día, mamita de mi amor
agradezco tus cuidados
son el brillo de un sol.